Quererle.

Es una sensación tan real pero tan fantástica.
Es una sensación que estoy segura que muchísimas personas todavía no han experimentado.
Es una sensación mágica, en la que te sientes como una verdadera protagonista de tu propia película, solamente por el hecho de saber que casi todo te va bien, que estás viviendo tu propio sueño de ser feliz.
Es esa sensación de conocerlo desde hace ya tantos meses y no cansarte de mirarle a esa carita. Que todavía exista esa magia de miraros y sonreír de oreja a oreja, con una mirada de regalo que muestra complicidad.
Es saber que lo tendrás siempre ahí, a tu lado, y que podrás ir cogida de su mano sin temor a quién os vea, y si os ve esa que te tiene tanta envidia, mejor que mejor. :)
Es tener en cuenta todos los besos, abrazos, caricias, afectos, cariños, gestos que hace solo por ti.
Es que cuando te deje en tu casa, ya estés deseando de volver a estar con él, a su lado, y darle un abrazo porque lo has echado de menos.
Es el simple hecho, de sentir por él lo que no has sentido por nadie.
3 meses y 12 días. :)